La tortilla de patatas es un clásico de la cocina española. Existe una gran variedad de recetas de este plato, pero todas deben coincidir en una cosa: su delicioso sabor. La tortilla española se hace partiendo de tres ingredientes: los huevos, las patatas y un buen aceite de oliva. Cada casa la cocina de una manera particular o introduce nuevos ingredientes a la receta original, como por ejemplo cebolla o calabacín. A continuación os enseñaremos cómo preparar una auténtica tortilla española.

Podríamos empezar discutiendo si la hacemos con o sin cebolla. Esta vez, la haremos con cebolla, ya que en España reúne a un gran número de adeptos porque añade un toque suave y dulce a la receta. Aunque te recomendamos que, si cocinas para un grupo, preguntes primero, así evitarás contratiempos de última hora.  En caso de decidir hacerla sin cebolla, los pasos son los mismos, quitando simplemente la presencia de la cebolla.

El primer paso de todos es básico: cortar y freír las patatas y la cebolla. En nuestra receta para 4 personas, necesitaremos 500 gramos de patatas y 1 cebolla. Las podemos cortar en rodajas finas, para posteriormente introducirlas a la sartén. Dejamos que se hagan a fuego medio suave, con aceite de oliva virgen extra, hasta que están doradas.

Después, llega el turno de mezclar nuestro cocinado con los huevos. Para esto, debemos sacar de la sartén las patatas y las cebollas, escurrirlas, añadir un poco de sal y mezclarlo bien con los huevos batidos. Para 4 personas, la cantidad de huevos recomendada es de 5, más o menos.

Por último, cocinaremos esta mezcla en la sartén. Para cocinar correctamente la tortilla de patatas, pondremos un par de cucharadas de aceite de oliva y verteremos todo a la sartén. Poco a poco, la mezcla irá cogiendo forma. Podemos ayudar dándole forma por los bordes. Una vez tengamos una cara cocinada, debemos girar con mucho cuidado y rapidez la tortilla, para que se haga la otra cara. Para terminar la faena bien hecha, solo queda emplatar nuestra auténtica tortilla de patatas española.

¡Y ya está! Así de fácil.