¿Qué es el Mindfulness?

El Mindfulness podríamos decir que es mucho más que una práctica: es una filosofía de vida. También llamada como “Atención Plena” o “Plena conciencia”, se trata de la capacidad para prestar atención de manera consciente al momento presente. Durante nuestro día a día, estamos constantemente atendiendo a pensamientos, obligaciones, rutinas y preocupaciones. Precisamente, el Mindfulness tiene la meta de liberarte de todo aquello que no es el momento presente, aceptando la realidad, fluyendo con nuestro ser y calmando nuestra mente, sin juzgar. 

Viajar: desconectar y conectar 

Muchas personas viajan con la finalidad de desconectar de la rutina y conectar con sí mismas. Adentrarse a nuevos rincones, experiencias y culturas implica poner en pausa el estrés de nuestra rutina, a la vez que descubrir una parte de nosotros en otro lugar del planeta. Por lo tanto, podríamos aplicar la técnica de atención plena mientras viajamos, siendo conscientes de todo, pero al mismo tiempo, solo del momento presente. 

¿Cómo aplicar el Mindfulness a nuestro viaje?

Viajar y encontrar la paz es posible, gracias al Mindfulness. Pero… ¿cómo podemos aplicarlo a nuestro viaje? Descubrir sin pensar en nada más; tener la pasión de observar lo que nos rodea justo en aquel momento; desconectar del móvil; visitar un lugar místico, mágico o especial, cerrar los ojos y escuchar sus sonidos; o meditar y hacer yoga, son acciones imprescindibles que podemos hacer todos y aplicar fácilmente en cualquier viaje. 

Viajar implica empezar una nueva aventura lejos de casa, descubrir nuevos mundos y conocer a personas únicas y especiales. Desconecta, relájate y que la mayor preocupación sea qué visitar. Camina y déjate llevar por tu instinto, no juzgues a tu alrededor y empápate de la cultura y las personas que te encuentres por el camino. Y, sobre todo, vive el momento. ¡Sé presente! 

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